Sopa Papabeotes
Si queréis distraer a los peques y alejarlos de la tele, que aprendan jugando inculcándoles el amor por la buena comida, y que mejor juego que meterlos en la cocina y que aprendan y valoren lo que luego se van a comer, explicarles de donde vienen los alimentos y lo que cuesta que llegue a nuestras casas, así aprenden a valorarlo y os aseguro que lo disfrutan muchísimo.
Como sabéis tengo dos preciosas nietas Sara de tres años y Marta de cinco, son hermanas y les encanta meterse en la cocina conmigo, en esta ocasión es Marta la que me ha acompañado.
Marta tiene uno de los mejores regalos que un padrino puede hacer a su ahijada, la colección completa de libros de recetas malagueñas y es que Fernando Rueda además de ser su padrino es el autor de los mismos, una joya que cuidamos con mucho mimo y que poco a poco entre las dos iremos practicando y rectificando a nuestro gusto, así cuando ella sea grande tendrá un bonito recuerdo y toda la historia de la cocina malagueña.
Como bien dice Fernando Rueda en el libro, ésta es una receta propia de la cocina sencilla, pocos ingredientes y barato, aunque ahora precisamente el bacalao no se puede decir que sea un producto barato, dependiendo el lugar se le conoce también como guisillo de San José o contentamaríos.
Ingredientes:
1 nieta de 5 años con muchas ganas de aprender a cocinar
1/2 kg. de patatas
200 grs. de bacalao desalado
3 dientes de ajo
2 huevos
1 hoja de laurel
2 ramitas de perejil
2 huevos medianos
1 yema
5 granos de pimienta negra
2 cucharas de pan rallado
zumo de 1 limón
2 cucharas de aceite de oliva virgen extra
1 cucharadita de sal
aceite de oliva virgen extra para freír
Modo de hacerlo:
Primero tenemos que acomodar a la pequeña cocinera, importante trabajar a gusto y segura, picamos muy pequeñito una ramita de perejil
En un bol grande, cascamos los huevos y lo batimos, la concentración es máxima.
Esta tarea es mía, desmenuzar el bacalao y picarlo pequeñito, junto con dos dientes de ajo, reservo las espinas para incorporarlos al caldo y que dejen allí su sabor.
En el bol donde tenemos los huevos ya batidos, vamos incorporando el perejil, el bacalao desmenuzado, machacamos la pimienta en el mortero, algo que a Marta le encantó, añadimos el bacalao, y lo vamos mezclando todo.
Por último vamos añadiendo poco a poco el pan rallado, hasta que la masa coja consistencia y podamos trabajarla, Marta va cogiendo pequeñas porciones y haciendo bolita, para nada le preocupó pringarse las manos, al contrario lo disfrutó muchisimo, hay que dejar a los niños que experimenten con nuevas texturas, que se manchen las manos.
Ahora empezamos la dura tarea de pelar las patatas, pero todo se consigue con tesón y a Marta eso le sobra, aunque un poco de ayuda tampoco le vino mal.
Con las patatas ya troceadas, las vamos poniendo en la cacerola, con la ramita de perejil
Le añado 1 litro de agua, las espinas del bacalao, un diente de ajo, la hoja de laurel, un par de cucharadas de aceite y lo pongo a fuego medio hasta que las patatas estén tiernas, retiro las espisas que ya han hecho su trabajo.
Mientras las patatas se cuecen, voy friendo los papabeotes, y los dejo reservados.
En un cuenco pongo la yema de huevo y exprimo medio limón, lo bato y lo incorporo a las patatas que ya están tiernas, y los papabeotes, un minuto a fuego medio y listo para llevar a la mesa y disfrutar
¡¡¡¡ Ahhhhhhh.......!!!!! Esta entrada es para morir de amor.....qué preciosidad de niña, que arte y que riquisima receta. Tiene una gran maestra, su abuela y un gran padrino, al que igual que a ti admiro y sigo.
ResponderEliminarNunca he probado éste plato, habia oido hablar de él y para serte sincera no me habia fijado en él en los libros de nuestro querido profesor.
Una vez más das una lección de cariño, pasión y buen hacer....por la cocina, por la familia y por la gastronomia malagueña.
Enhorabuena!!!!!!
Gracias Toñi, Marta lleva el arte de la cocina en la sangre desde que nació, y yo procuraré que nunca lo pierda.
EliminarGracias una vez más por pasarte y dejar tu comentario, siempre lleno de palabras bonitas que me alegran el día.
Besitosss amiga mia
Qué entrada más bonita, la que está pa comérsela es tu nieta, qué ternura de niña y tan trabajadora ella, que se ve que está fascinada en su labor! La sopa me ha encantado también, y quizás, si el bacalao está caro (y aquí no existe!) podemos poner otro pescado? Me encantó el nombre ese de "contentamaríos". Besos querida amiga
ResponderEliminar