Mermelada de naranjas cachorreñas

Según relata el biólogo Manuel Talón Director del Centro de Genómica del Instituto de Investigaciones, el primer árbol de naranja  fue producido por un cruce de una mandarina salvaje ácida y llena de semillas incomestible que enviaría su esperma el polen masculino a través del viento hasta las flores de la madre un pomelo,  y fruto de esa unión nacería la primera naranja. El ancestro de todos los cítricos vivió hace unos ocho millones de años en el sudeste asiático  A finales del siglo XV la naranja llegó a España de la mano de los comerciantes portugueses e italianos, y allá  por el 1763 los españoles introdujeron la naranja agria en Florida donde  tuvo gran aceptación entre los colonos.
En 1178 la obra más antigua dedicada al cultivo de los agrios escrita por Han Yen-chih, cuenta ya con 27 variedades  entre ellas, la naranja dulce, la agria, la mandarina, el kumquat, y describe practicas de injerto, poda, tratamiento de plagas ......
Información sacada de  Historia de la Naranja y El País



Ingredientes:
naranjas cachorreñas del Valle del Guadalhorce
azúcar
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tarros con cierre hermético





Modo de hacerlo:
 Lo primero que hago es lavar muy bien las naranjas y quitar todo resto de suciedad, las pelo  procurando dejar lo mínimo blanco, y si queda algo con el cuchillo se termina de limpiar.
Corto la piel de la naranja procurando que no lleve nada blanco en tiras muy finas.
Corto los gajos en vivo retirando la pulpa y las semillas
Mezclo la cáscara cortada en juliana con la pulpa de las naranjas y por cada medio kilo se le añade 250 gr. de agua, las semillas las pongo en un cuenco, le añade un vaso se agua y la dejo todo reposar hasta el día siguiente.
Pasado 24 horas, añado el agua de las semillas a la pulpa con la piel, veréis como el agua de las semillas ha gelificado.
Ya todo junto, lo pongo en el fuego a hervir a fuego medio unos 30 minutos o hasta que las cáscaras de las naranjas estén tiernas, es el momento de pesar lo que nos quedan en la cacerola y añadir la misma cantidad de azúcar, y dejarlo  reposar hasta el día siguiente.
  Lo pongo a fuego medio hasta que la mermelada coja el punto que nos gusta, unos 30 minutos es suficiente.
Ya solo queda embotarla en tarros  perfectamente esterilizados, y  llenarlos hasta el borde,  ponerlos bocabajo para que enfríen y hagan el vacío
Y disfrutarla en el desayuno, merienda, como parte del aliño de ensaladas etc. etc.

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